Esta habitación, a pesar de ser un espacio nuevo en mi vida, me va a acompañar durante mi nuevo día a día y por eso lo he elegido. Es un lugar pequeño con dos pequeñas ventanas que permiten una entrada de luz la cual se amplifica con el blanco de las paredes y el mobiliario. Vemos que contiene una cama con un canapé y un cabecero, una mesita de noche, una estantería con baldas decorada, un escritorio y silla.
La razón por la cual he elegido este lugar es simplemente porque en él paso gran parte de mi tiempo, es mi lugar más frecuentado en mi día a día. Este espacio es pequeño y está decorado completamente a mi gusto por tanto, lo encuentro muy acogedor. Lo suelo mantener ordenado lo cual también me transmite mucha paz.
Existe un elemento el cuál encuentro un poco molesto y es el pilar ubicado en la pared al lado de la cama, crea un hueco extraño y, además, la imposibilidad de cambiar la cama de sitio ya que habría que desatornillar el cabecero de la pared.
Creo que no me sentiría igual en otro espacio ahora mismo debido a que, desde mi punto de vista, cada espacio alberga unas características diferentes. Ese conjunto de características son las que nos provocan diferentes sensaciones y, aunque esas sensaciones puedan ser muy parecidas, nunca llegarán a ser exactamente iguales.
Las condiciones de un espacio influyen mucho en sus ocupantes ya que cada espacio tiene unas características u otras. Cada ocupante tiene un gusto diferente y depende de cuanto se asemejen las características de ese espacio al gusto del ocupante, se sentirá más cómodo o menos en ese lugar.
¿Como influyen las condiciones de un espacio sobre sus ocupantes? Un ejemplo que responde fácilmente a esta pregunta y lo demuestra es el siguiente: se trata de la organización del espacio y de su limpieza. Si un espacio se muestra desmadrado, sin ningún tipo de orden y limpieza, causa mucho ruido mental en la persona que lo habita. Muchas personas no pueden dormir o estudiar si su habitación o oficina no está ordenada, a parte de ser una distracción a veces puede llegar a ser molesto a la vista.
Reflexión sobre el texto ‘Atmósferas’ de Peter Zumthor
Peter Zumthor, en su texto “Atmósferas” reflexiona en profundidad sobre este concepto relacionandolo con la arquitectura. Se centra en como los diferentes espacios y edificios afectan, de manera distinta, a las personas que lo habitan, creando así una experiencia emocional y sensorial diversa en cada persona que va más alla de la mera funcionalidad.
Una idea central que Zumthor aborda és la noción de “grados de intimidad”, refiriendose a como la relación de tamaño, masa y peso entre un edificio y sus ocupantes influye en sus experiencias dentro del mismo. Las proporciones generales del edificio, las puertas, los muros, etc. juegan un papel importante en la sensación de confort o intimidación que se genera en el ocupante. Dependiendo de las combinaciones que se hagan con estos, se transforma la percepción del entorno haciendo que los ocupantes se sientan más o menos conectados a él.
Para Zumthor la luz natural es fundamental ya que tiene una gran importancia en su interacción con los materiales para producir esos efectos atmosféricos de los que el habla. La manera en la que la luz penetra los materiales y se refleja en ellos puede alterar la percepción del espacio, influyendo así en la experiencia de sus ocupantes. Este juego entre la luz y los materiales és imprescindible para la creación de un ambiente que hable a los sentidos.
En el texto, el autor menciona dos enfoques de la arquitectura. En primer lugar, percibe el edificio como una ‘masa de sombras’, este enfoque crea la necesidad de tener en cuenta la relación que tienen con la lux la forma y la estructura antes de introducir la luz artificial. En segundo lugar, también destaca la importancia de la elección de materiales en función de como interactúan con la luz y cerciorarnos de que los elegidos creen esa atmósfera que deseamos.
Por último, Zumthor menciona su preocupación por el hecho de que sus creaciones arquitectónicas, aparte de ser funcionales, también se integren de manera armoniosa en su entorno, siendo así recordada por la gente. Es por esto que zumthor busca crear una experiencia humana y emocional en los ocupantes de sus edificios. Desde mi punto de vista, esta es una preocupación que suele invadir la mente de muchos arquitectos. Su obra, nos hace reflexionar sobre el impacto que tienen los edificios que nos rodean en nuestra vida diaria y su manera de ‘alterar’ nuestra percepción sobre el mundo a nuestro alrededor.
Esta visión que Peter Zumthor ofrece sobre la arquitectura es algo que yo también comparto y me siento identificada. Mi familia y yo tenemos la suerte de poder viajar a diferentes sitios cada verano y en cada viaje me suelo fijar mucho en los edificios, museos… Menciono esto porque hay ciertos edificios que por alguna razón o otra captan más mi atención o me hacen sentir de diferentes maneras. Por ejemplo, en Bergen hay unas casitas de colores, lo cual llama mucho la atención, en el embarcadero que eran el antiguo imperio comercial y al acercarnos veíamos que cada puerta daba a un pasillo estrecho, largo y abierto, esto causaba mucho misterio y curiosidad.
Algo parecido me ocurre en los museos, en un museo cada sala esta decorada de cierta manera según la exposición que este en el momento. Igual una sala tiene las paredes forradas de papel, otra de mármol, mientras que otra simplemente las tiene de madera. Unas salas están más cargadas otras menos… El texto de Zumthor me recuerda a las diversas sensaciones que me causan las salas de los museos y a los diferentes edificios que veo por las calles.